Ciudades lentas, ciudades ecointeligentes
Como una consecuencia del movimiento Slow, las Slow Cities buscan el bienestar de sus vecinos atendiendo a principios alejados de los ritmos habituales de las grandes urbes, en las que prima la rapidez a la calidad de vida entre sus habitantes. Son lugares en los que se concentra la actividad humana entorno a plazas, se fomenta la producción de alimentos autóctonos y los pequeños negocios.