La instalación de placas solares en nuestro país ha dado un paso de gigante. En los últimos años, el interés por el autoconsumo se ha disparado entre la población y son muchas las familias que se están planteando pasarse a la energía verde. Pero no todas las comunidades funcionan al mismo ritmo; la zona con mayor implantación es Cataluña. Como indica Otovo, empresa de autoconsumo, la penetración de la energía solar en esta comunidad está registrando un crecimiento especialmente rápido.
Las cifras son elocuentes y tienen un protagonista destacado: el municipio de Sant Cugat del Vallés. Esta población cercana a Barcelona encabeza el ranking de instalaciones fotovoltaicas, con 451 contabilizadas a finales de año. Después de Sant Cugat, la segunda ciudad en número de placas es Barcelona, con 384 instalaciones, seguida de Vallirana (117), Sabadell (116) y Terrassa (101).
Destaca también en la clasificación la localidad de Santa Eulàlia de Ronçana, en la comarca del Vallés Oriental. Su población no supera los 7.200 vecinos, pero es la localidad catalana con mayor número de instalaciones solares por cada 1.000 habitantes. En estos momentos, Santa Eulàlia de Ronçana cuenta con 100 instalaciones en funcionamiento, tan una sola menos que Sabadell, que tiene 211.00 habitantes.
Autoconsumo en Cataluña: razones del éxito
Tanto Sant Cugat como Santa Eulàlia de Ronçana o Vallirana son zonas con gran presencia de viviendas residenciales y disfrutan de una alta renta per cápita; son factores que intervienen favorablemente en la implantación de la energía solar, pero también hay otros elementos que han facilitado la expansión.
Sin duda, un hecho determinante fue la derogación en 2018 del denominado «impuesto al sol». Era un gravamen implantado por el gobierno del PP que penalizaba el autoconsumo eléctrico. Junto a esta medida política, ha influido positivamente el abaratamiento del coste de las instalaciones y ha habido factores territoriales que también han dinamizado el sector.
• Ayudas al autoconsumo
Los sistemas de placas solares en Barcelona se benefician de varias medidas a nivel institucional. Si bien no existen ayuda directas por parte del gobierno autonómico, las instalaciones están subvencionadas por muchos ayuntamientos en forma de descuentos. En numerosos municipios catalanes se aplica una rebaja del IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles) de un 50% y una bonificación del ICIO (Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras) que puede llegar al 90 ó 95%.
• Sensibilidad ecologista entre la población
Cataluña siempre ha tenido una sensibilidad especial hacia los temas relacionados con el medio ambiente. Es una sociedad muy concienciada con la sostenibilidad, tanto en el contexto urbano como en ambientes rurales.
• Esfuerzo de las empresas y amortización de la inversión
La expansión de las placas solares en Cataluña también ha de atribuirse al esfuerzo de las empresas. Están realizando una importante función pedagógica, con campañas de información que han conseguido convencer a los clientes. El dato que más valoran los consumidores es el de la amortización de la inversión. Hasta hace unos años, los costes de la instalación eran muy elevados y se tardaban unos 7 años en amortizar el capital invertido. Hoy, con el abaratamiento de precios en materiales, la inversión queda compensada en 3 ó 4 años.
Si, las energias renovables estan en auge, y esto ayuda mucho a la preservacion del medio ambiente