¿Cómo están cambiando los bosques del mundo? (2)

Bosques del mundo con gestión sostenible

Después de adentrarnos en los cambios ocurridos en los bosques durante 2015 y conocer datos que evidencian tanto la expansión del bosque como su deforestación vamos a concluir el resumen de la excelente guía editada por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

La producción/consumo de madera en general ha aumentado a lo largo del período en examen, mientras que la dependencia del combustible de madera se ha mantenido alta. En 1990, las extracciones anuales de madera totalizaron 2,8 billones m3, de los cuales el 41% fue para combustible de madera; en 2011 las extracciones anuales de madera llegaron a 3,0 billones de m3, de los cuales el 49% correspondió a combustible de madera. Tanto la proporción de las extracciones de madera para combustible como la cantidad total de madera usada como combustible han aumentado.

En 2015, alrededor del 30% de los bosques del mundo fueron bosques con función productiva, y esta proporción representa un leve aumento desde 1990 (28%). Los bosques designados a uso múltiple pasaron del 23% de la superficie de bosque total al 26% entre 1990 y 2015. El bosque de uso múltiple suministra madera, pastizales, productos forestales no madereros, agua, lugares de recreación y condiciones para la gestión de la flora y fauna silvestres. Los incrementos proporcionales registrados se deben en parte a la estabilidad de la designación de la función y en parte a la disminución del área total de bosques.

La conservación de la biodiversidad constituye el objetivo principal de la gestión forestal en el 13% de los bosques del mundo, y, desde 1990, a la categoría de conservación se han añadido 150 millones de ha de bosque.

Los bosques destinados a la protección del suelo y el agua equivalen al 25% de la superficie de bosque total

La reducción de las existencias del bosque es un fenómeno menos visible pero importante en muchos lugares del mundo. Durante los últimos 25 años las existencias mundiales de carbono en la biomasa forestal disminuyeron en casi 17,4 Gigatoneladas (Gt). Esta reducción ha resultado fundamentalmente de la conversión de los bosques a otros usos y de la degradación de los mismos.

Ejemplo de explotación responsable de recursos madereros

El progreso hacia la Gestión Forestal Sostenible (GFS) ha sido importante a lo largo de los pasados 25 años. El 99% de los bosques del mundo están regidos tanto por políticas como por una legislación que apoyan esa gestión a nivel nacional y regional. La mayor parte de los países ofrecen a las partes interesadas la oportunidad de aportar en los procesos de políticas nacionales de sostenibilidad, si bien no siempre con la misma eficacia. Los avances en este ámbito han sido mayores en las zonas templadas, pero muy dispares en los trópicos, donde la capacidad de aplicar las políticas relativas a la gestión sostenible sigue siendo insuficiente.

Los datos sobre los recursos forestales se generan en la actualidad con una frecuencia mayor que en cualquier otra época anterior. En 2014, 112 países habían elaborado Inventarios Forestales Nacionales (IFN) que abarcaban cerca del 77% de la superficie de bosque mundial, y sus inventarios ya se habían completado, o se habían iniciado después de 2010. La superficie cubierta por un inventario forestal nacional entre 1970 y 2014 es de 3,3 billones de ha, o el 82% de la superficie de bosque total. Esto representa inversiones cuantiosas que los gobiernos han realizado en años recientes con la finalidad de comprender mejor los recursos forestales que poseen. Una elevada proporción de la superficie de bosque (92%) también es objeto de reporte a través de sistemas nacionales de informes, pese a que, en los trópicos y en los países de bajos ingresos, el reporte de datos forestales es aún imperfecto.

La superficie sujeta a planes de gestión forestal también ha aumentado. En 1953, los planes de gestión forestal abarcaban alrededor del 27% del bosque de producción; en 2010, los planes de gestión cubrían el 70% de estos bosques. En 2010 la superficie gobernada por estos planes era del 52% de la superficie de bosque total, y se repartía en porciones iguales entre las finalidades de producción y de conservación. La mayoría de los planes exige la participación con cláusulas específicas de la sociedad y la comunidad, y la delimitación de bosques con alto valor de conservación (HCVF, por sus siglas en inglés). Para más del 50% de toda la superficie sujeta a planes de gestión forestal se estipulan requisitos relativos a la protección del suelo y el agua.

La superficie bajo gestión forestal certificada ha continuado en aumento, pasando de 18 millones de ha certificadas con reconocimiento internacional en 2000 a unos 438 millones de ha en 2014. Alrededor del 90% del total de la superficie certificada en 2014 está en las zonas ecológicas templada y boreal, aunque también ha habido aumentos, aunque a un ritmo más lento, en las zonas tropicales y subtropicales.

El sector forestal da empleo en la actualidad al 1,7% de la fuerza de trabajo mundial, de la cual el 0,4% está ocupada en el propio bosque. El resto está empleada en sectores como el transporte, la elaboración y la fabricación fuera del bosque

La mayor parte de los bosques sigue siendo de propiedad pública, pero la propiedad del bosque a manos de comunidades e individuos ha ido en aumento. La proporción de los bosques de propiedad privada ha ascendido del 13% en 1990 al 19% de la superficie de bosque total en 2010. La mayor parte del incremento de la propiedad privada ha tenido lugar en países de ingresos mediano alto. Sin embargo, para los países que tienen bosques privados es una proporción mucho más grande: en 1990 casi el 26% de los bosques en estos países era de propiedad privada, cifra que aumentó a 30% en 2010. Los derechos de gestión de bosques públicos ejercidos por entidades privadas han aumentado considerablemente (del 3 al 15% de la superficie de bosques públicos) entre 1990 y 2000.

Los bosques son sumideros de CO2

Durante los últimos 25 años, los bosques del mundo han cambiado de forma dinámica y diversificada. Los países disponen hoy de conocimientos acerca de sus recursos forestales incomparablemente superiores al pasado y, en consecuencia, poseemos ahora un cuadro más coherente de los cambios ocurridos en los bosques del mundo. La tasa de pérdida de superficie de bosques está en declive, y los indicadores relativos a la gestión forestal sostenible indican progresos efectivos.

Pero, al mismo tiempo, sigue habiendo grandes dificultades por superar: las políticas, legislación y regulaciones, por muy sólidas que sean, no siempre van acompañadas de incentivos o de medidas de aplicación eficaces. Pese a los esfuerzos llevados a cabo, las prácticas insostenibles y la conversión forestal persisten, y en algunos países los beneficios que derivan del aprovechamiento de los bosques no llegan a las comunidades locales.

Este estudio documenta tanto los importantes avances logrados en la gestión forestal como la necesidad de no interrumpir los esfuerzos encaminados a sostener la gestión forestal para bien de las generaciones actuales y futuras.

Podéis acceder a la Guía completa de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) de donde procede este extracto, y que está disponible en nuestro fondo documental ecointeligente o desde este enlace: Evaluación de los recursos forestales mundiales 2015.

Ricardo Estévez

Mi verbo favorito es avanzar. Referente en usos innovadores de TIC + Marketing. Bulldozer sostenible y fundador de ecointeligencia

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